¿Qué cosas NO se debe decir a las personas con discapacidad en el trabajo o cualquier lugar?

Es común escuchar a muchas personas preguntar: “¿Cómo me refiero a él o ella?” cuando se trata de alguien que vive con una discapacidad. Como hemos indicado en reiteradas ocasiones, el colectivo de la discapacidad no puede seguir siendo invisibilizado, ya que esto trae como consecuencia miedos y prejuicios sobre el acercamiento a este grupo, independientemente del tipo de discapacidad que sea.

Desde la perspectiva de las personas con discapacidad, compartimos este artículo que quizás ayude a cambiar una mirada más empática hacia las PcD.

La pregunta “¿cómo referirnos a las personas con discapacidad?” no debería ser una pregunta que necesite hacerse. Las personas con discapacidad no buscan en Google “¿Cómo referirme a las personas sin discapacidad?” o “¿Cómo tratarlas?”. ¿Para qué lo harían?

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En el mundo, se estima que aproximadamente el 15% de las personas tiene algún tipo de discapacidad. Este porcentaje es probablemente mucho más alto de lo que mucha gente cree, especialmente cuando consideramos los bajos niveles de conciencia y aceptación de la discapacidad que experimentamos la mayoría de las personas.

Si habláramos con personas con discapacidad de todo el mundo, notaríamos que todas tienen al menos una cosa en común: todas tienen numerosas historias sobre preguntas extrañas que les han hecho, comentarios inapropiados que han experimentado o han sido juzgadas simplemente por tener discapacidad. Esto significa que las personas que no tienen discapacidad a menudo están tan atrapadas por las diferencias de las personas con discapacidad que olvidan el lado individual o humano de ellas.

Pero en realidad, cada persona con una discapacidad es tan única como cualquiera. Independientemente de su impedimento, hablar con una persona con discapacidad no debería ser diferente de hablar con una persona sin discapacidad. Sin embargo, es importante recordar que si trabajas con una persona con discapacidad, estás trabajando con un individuo más, un ser único, una persona con una identidad propia (más allá de la discapacidad). Simplemente es tu colega por mérito propio y no solo por llenar un cupo.

Te brindo 11 cosas que no se deben decir a las PcD en el trabajo

1. "¿Qué te pasó?/ ¿Qué tienes?"
   

Estas preguntas son poco asertivas y es poco probable que conduzcan a una conversación positiva. En lugar de eso, si tienes curiosidad sobre la discapacidad de alguien, puedes preguntar de manera positiva y respetuosa.

Por ejemplo, podrías decir: “¿Puedes compartir algo sobre tu experiencia personal con la discapacidad?” o “¿Cómo afecta tu discapacidad a tu día a día?”.

Recuerda que cada persona con discapacidad tiene su propia historia y perspectiva, y es importante tratarlas con empatía y respeto.

2. “No pareces tener una discapacidad”

Celebrando la diversidad: Cada persona tiene su propia experiencia. No hay un “aspecto de deterioro” estándar. Las personas con discapacidad pueden no mostrar características que sean comunes y eso esta bien.

3. “Eres tan inspirador/increíble”

Reconociendo la fortaleza: Las personas con discapacidad también llevan a cabo tareas cotidianas con determinación. No necesitamos resaltar su discapacidad de manera excesiva para admirar su valentía.

4. “Niña/niño inteligente”

Valorando habilidades diversas: La inteligencia y la conciencia de una persona con discapacidad son igualmente valiosas. No subestimemos su capacidad solo porque su enfoque difiere del nuestro.

5. “Debe ser tan difícil para ti”

Perspectivas individuales: Cada vida tiene sus desafíos. No asumamos que la discapacidad hace que todo sea más difícil. En cambio, celebremos la resiliencia de cada persona.

6. “Sé cómo te sientes (sobre tener una discapacidad)”

Respetando experiencias únicas: No todos experimentan la discapacidad de la misma manera. Reconozcamos y aprendamos de las historias personales.

7. “Tengo un amigo/tío/hermano/abuela/compañero del club de lectura con discapacidad, ¿lo conoces?”

Reconociendo la individualidad: Cada persona con discapacidad tiene su propia historia. No es necesario presentar a todas las personas con discapacidad que conocemos.

8. “Rezaré por ti”

Buenas intenciones: Expresamos nuestros buenos deseos de manera respetuosa y considerada. Aceptemos y apoyemos a cada individuo tal como es.

9. "No podrás hacer eso"

Nunca asumas que sabes lo que tu colega puede o no puede hacer, especialmente si no lo conoces bien. Como mencioné anteriormente, las personas con discapacidad suelen ser excelentes solucionadoras de problemas. Puede que no realicemos las tareas de la misma manera que los demás, pero eso no significa que no podamos hacerlas. ¿Quién puede asegurar que un colega con discapacidad no ha encontrado una mejor manera de abordar las cosas?

10 ¿Tienes poderes especiales/habilidades especiales?

Esta pregunta se plantea a menudo a las personas con trastorno del espectro autista. La idea de que las personas con autismo tienen “habilidades especiales” proviene de programas de televisión y películas, como “The Good Doctor” o “Rain Man”.

En pocas palabras, no todas las personas en el espectro autista tienen una “habilidad única”. No es aconsejable basar nuestro conocimiento sobre las deficiencias en personajes ficticios.

11, ‘Entiendo…’ (adivinando lo que dice la persona) o ‘No puedo entenderte’ (luego sigue adelante)

Si tu colega tiene una discapacidad del habla, es probable que esté acostumbrado a repetir lo que dice para asegurarse de que se le entienda. Por experiencia personal, es preferible repetir cinco veces a que alguien adivine lo que estás diciendo. Imagínate si adivinaras mal y respondieras “sí” a algo completamente diferente de lo que la persona quiso decir, simplemente por no tomarte 5 segundos adicionales para aclararlo.

Espero que estos 11 consejos sean utile y no olvides que las personas con discapacidad ante todos son personas.